domingo, 31 de agosto de 2008

La princesa inca

A PSIQUIATRAS Y PREDICADORES


No tienes derecho
a decirme si debo o no debo
nadie es más que nadie
ni tus libros me sirven
porque yo tengo los míos

Y hay veces que no hay libros
que la vida es obserbar
y sentir como duele
esa misma vida
en el origen profundo de las venas

dejar que te voltee y te hunda
mirar si tiene la forma olvidada
de una ciudad que visitaste
hace muchos años
y todavía está en tu recuerdo

No tienes derecho
a decirme si soy o no soy
porque ser nadie sabe
que todos nosotros somos miedo y alegría
Y a la vez lluvia y hastío

No tienes derecho a decirme
si sirvo o no sirvo
porque no hay números para el alma
ni medicaciones para un alma enferma

¡No!
No hay precio
aunque insistan
vendiéndonos y comprándonos
en cada esquina

No tienes derecho,
jamás,
a ser yo.

LA PRINCESA INCA

¿locura por exceso de lucidez?


sábado, 2 de agosto de 2008

cinefórum


Hemos tenido nuestro último día de cinefórum de la temporada el mismo día de la muerte de BERGMAN. En esta velada estuvimos viendo un chisme de esos que se ponen sobre los ojos y ves escenas en muchas dimensiones. Ese tipo de cachibaches que fascinaron tanto a Bergman.

Empezamos las sesiones de cinefórum con un tecito y película y hemos terminado haciendo cena-cine-fórum y saliendo de casa de Isabel a unas horas intempestivas. La casa de Isabel es una casa abierta, bulliciosa y llena de gente. Llegas allí y te recibe Jara saltándote encima y olisqueando lo que llevas en la bolsa. Con el buen tiempo nos instalamos en la terraza. Hablamos, hablamos y hablamos mientras comemos lo que ha guisado Isabel, un conejo (esta vez) que está de cine. Las horas vuelan y todavía no hemos visto la película. ¡Hay que verla, hay que verla!